En entradas precedentes hemos comentado que es aconsejable imprimar antes de pintar. ¿Algunas veces sí y otras no? ¿Encarece mucho el pintado?
Con frecuencia, una sola mano de pintura bastará pero hay ocasiones en las que el paramento requiere preparación previa para que el pintado sea efectivo y duradero. Y la inversión será rentable a largo plazo porqué el pintado durará más.
Es muy importante elegir una imprimación específica para cada tipo de superficie y material y si es de color que se parezca al del acabado final.
Veamos a continuación las propiedades y usos de las imprimaciones:
1 – Sellante: Evitamos que la superficie chupe más pintura de la deseada cuando se proceda al pintado.
2 – Fijador: Ideal para superficies blandas, pulverulentas o que carezcan de la adherencia necesaria.
3 – Protector: Pueden ser fungicidas, insecticidas y protectoras de materiales delicados.
4 – Aislante: Las hay que actúan como repelente de humedades por lo que nos aíslan del agua. Y también como una primera barrera contra frío y calor.
En artículos sucesivos trataremos a fondo los diferentes tipos de imprimaciones, para elegir correctamente este complemento ideal para el pintado.