Ya en la antigüedad se usaban mosaicos, terracotas y mármoles o se revestían con maderas, pieles y alfombras.
Las modas han cambiado pero los materiales se repiten combinados con nuevas propuestas. Hoy en día no es raro ver un suelo de madera en cocinas y baños y unos pavimentos industriales o hidráulicos convenientemente restaurados en un salón de ambiente futurista.
Por ello, el mundo de la pintura también ha desarrollado pavimentos continuos, en un principio pensados para la industria pero hoy en día también para la decoración. Y en mucho casos no hace falta ninguna obra porque se colocan encima del suelo existente. Son ideales para rehabilitación.
Es posible que desconozcan todo lo que ofrece el pavimento continuo. Tomen nota; suelos a base de hormigones, cementos y resinas. En acabados mates, brillantes o satinados. Metacrilatos. Pulidos y autonivelados. Antideslizantes y resistentes. En todos los colores. La oferta es tan variada que sólo nos quedará elegir el que más nos guste y se adapte mejor a nuestras necesidades.
Y pensando en el mantenimiento, existen todo tipo de acabados para proteger estos revestimientos, de manera que se puedan limpiar fácilmente, asegurando su belleza y durabilidad.
Es la decoración que pisa fuerte en estos momentos. Les invitamos a conocerla.