En el esfuerzo colectivo que tiene que hacer toda la ciudadanía para combatir el momento excepcional que vivimos , entra también NO fomentar el pánico anticipadamente. Ser constructivos y pensar que durará poco.
Ya hemos recibido comunicados de clientes que quieren aplazar sus pagos, cuando el confinamiento no ha hecho más que empezar y NO son empresarios afectados por el cierre de sus empresas.
Tendremos tiempo de reflexionar y negociar, cada empresa con su situación, pero precisamente los bancos y el estado están echando una mano en este sentido para perjudicar de la menor manera posible a las pymes y autónomos.
También salen a relucir las preocupaciones de muchos trabajadores por sus vacaciones. Sugiero que antes todos colaboren para mantener el puesto de trabajo que es lo prioritario y en su momento todos las disfrutaremos.
No pongamos las cosas más difíciles de lo que están e intentemos entre todos mantener el país a flote.